Stille Post
La ceguera
El conflicto kurdo-turco se remonta hasta finales de la década de los setenta y sigue tristemente con vigencia a día de hoy. Un enfrentamiento que ha dejado decenas de miles de muertos, territorios asolados y millones de desplazados. Un conflicto poco tratado en el cine —aunque hay excepciones muy valiosas como Nefes: Vatan sagolsun (Levent Semerci, 2009) o el documental Iki dil bir bavul (Ozgür Dogan, Orhan Eskikoy, 2008)— y que después de varios cortometrajes al joven cineasta alemán Florian Hoffmann le sirve como marco para contar una historia dramática y de denuncia acerca de las guerras y las manipulaciones periodísticas. El actor germano-iranio Hadi Khanjanpour da vida a Khalil, un ciudadano turco-kurdo que reside desde hace tiempo en Alemania y trabaja como profesor en una escuela de primaria. Aunque a su hermana hace años que la dieron por muerta a causa de un ataque del ejército turco, Khalil cree que sigue viva y tras visionar unos vídeos de su ciudad natal, la turca Cizre, piensa que la ha encontrado. El duelo y la culpa vertebran toda la obra a través de su protagonista, quien no se resigna a dar por fallecida a su hermana y carga como una losa el pecado de haber abandonado a su pueblo y la causa kurda.
En la cinta abundan las imágenes y vídeos reales grabados desde las ciudades donde tienen lugar las ofensivas, los atentados y la miseria. Lugares que el propio director visitó, recopilando material para hacer un documental sobre el horror que allí se padece, pero que una vez en Berlín decidió convertir en ficción. Con dichos vídeos, Hoffmann quiere señalar la importancia de los activistas y ciudadanos de a pie que graban todo lo que acontece con sus cámaras y móviles para difundirlo posteriormente a través de redes sociales o donde les dejen hacerlo. La cuestión periodística es introducida en el guion a través de la pareja del protagonista, que trabaja en una televisión alemana de importancia. La escasa cobertura que se le da a ciertos conflictos bélicos, el amarillismo con el que es tratado y la manipulación de dichos reportajes para dotarlos de espectacularidad son temas, en este sentido, que se denuncian en el filme.
Stille Post, película inaugural de la nueva edición del German Film Fest de Madrid, es un drama con atmósfera de thriller que aborda un conflicto de máxima actualidad debido a las negociaciones de Turquía con la OTAN para permitir la entrada de Suecia y Finlandia a la Alianza Atlántica, teniendo al grupo armado kurdo del PKK como debate de fondo, puesto que Erdoğan afirma que en estos países escandinavos se refugian muchos de sus miembros. La responsabilidad de Alemania en este conflicto y el choque ideológico que se produce en ciudades germanas son también tratados en la obra, la cual, a pesar de su aletargado ritmo, contiene suficientes alicientes para despertar el interés del espectador con un argumento centrado en el problema kurdo pero que puede extenderse a otros conflictos de latitudes diferentes. Conflictos bélicos que, por lo general, solo provocan la muerte de miles de inocentes, la devastación de muchos territorios, el dolor de muchas familias rotas y ningún ganador, porque como dice el personaje más anciano de la película, «ojo por ojo y acabamos todos ciegos».
Título original: Stille Post (Whispers of War)
Año: 2021
Duración: 94 min.
País: Alemania
Dirección: Florian Hoffmann
Guion: Florian Hoffmann
Fotografía: Carmen Treichl
Montaje: Marco Rottig
Reparto: Hadi Khanjanpour, Zübeyde Bulut, Vedat Erincin, Jeanette Hain, Jacob Matschenz, Barbara Philipp, Konrad Singer, Kristin Suckow, Sesede Terziyan, Aziz Çapkurt
Productor: Chromosom Filmproduktion, Deutsche Film- und Fernsehakademie Berlin (DFFB)