Orgullo + Prejuicio + Zombies
Después de una docena de adaptaciones en televisión y cine, ya poco quedaba por hacer con Orgullo y prejuicio, la más famosa y laureada novela de Jane Austen. Pero después llegó The Walking Dead, y también 28 días después (Danny Boyle, 2002) o Soy leyenda (Francis Lawrence, 2007), y el mundo se volvió loco por los zombies de nuevo. Y por aquello de que los clásicos nunca mueren y además se prestan a ser reinventados una y otra vez (si no, observen la cantidad de revisiones de cuentos infantiles que hemos tenido en los últimos años en la gran y la pequeña pantalla), se abrió la veda para mezclar el terror con algo que parecía impensable: la novela romántica
Seth Grahame-Smith lo hizo en una novela tremendamente exitosa, y la cosa, por supuesto, debía saltar al cine. Otros crossovers han seguido después. Gracias a la ¿imaginación? humana, hemos podido ver a un personaje histórico como Abraham Lincoln batallando contra vampiros o a las hermanas Dashwwod de Sentido y sensibilidad (a Jane Austen le ha tocado el trozo más grande y reconocible de este pastel) viéndoselas contra monstruos marinos de todo tipo y pelaje. Pero ahora toca hablar de las siniestras aventuras de las hermanas Bennett luchando por su vida mientras una horda de rabiosos zombies amenaza con arrebatárselas, todo ello sin perder la preocupación de encontrar un buen marido. Lo cortés no quita lo valiente, y nunca mejor dicho.
Porque eso es Orgullo + Prejuicio + Zombies. La trama de la novela de Austen seguida casi al milímetro, salvo por las modificaciones imprescindibles para introducir la trama zombie. No hay más. Al que no le guste o no le interese, que no mire. Y como tal, no se puede negar que es entretenida, que está bien hecha (la fotografía es ciertamente notable, y los efectos visuales y de maquillaje cumplen eficazmente con su labor) y que resulta más o menos interesante, al menos para justificar un visionado.
El principal problema de Orgullo + Prejuicio + Zombies es que la premisa inicial, es decir, la mezcla de las intrigas familiares y sentimentales de Austen con la epidemia zombie, nunca termina de funcionar. No sé cómo será en la novela pues no la he leído, pero da la sensación de que a la película le falta cohesión en su narración (ni siquiera sabemos cómo y por qué andan los zombies campando a sus anchas por la campiña inglesa, ni por qué importan esos zombies «vegetarianos», por así llamarlos) y, muy especialmente, humor por un tubo. En serio, ¿por qué no es más divertida? ¿Por qué no explota la parodia? ¿Por qué no se convierte en serie B pura, que es lo que pedía a gritos? Cosas inexplicables. Su otro problema es el ritmo y la duración. Sin duda le sobran fácilmente veinte minutos, y hay ratos en los que, directamente, no pasa nada. Dicho de otra manera: faltan ataques de zombies, especialmente en su segunda hora, y sobran conversaciones y amoríos.
En definitiva, una cinta pasable, más o menos entretenida, pero que daba para un espectáculo muchísimo más satisfactorio y, por supuesto, con más mala baba. Al menos los actores funcionan, especialmente la pareja protagonista que forman Lily James y Sam Riley (uno se pregunta si Charles Dance y Lena Headey simplemente están allí por su renovada fama gracias a Juego de Tronos).
Lo mejor: Las ganas de su reparto y la fotografía
Lo por: Le falta mucho humor y mucha coherencia
Calificación: 5/10
Título original: Pride and Prejudice and Zombies
Año: 2016
Duración: 108 min.
País: Estados Unidos
Director: Burr Steers
Guión: Burr Steers (Novelas: Jane Austen, Seth Grahame-Smith)
Música: Fernando Velázquez
Fotografía: Remi Adefarasin
Reparto: Lily James, Sam Riley, Bella Heathcote, Douglas Booth, Jack Huston, Charles Dance, Lena Headey, Matt Smith, Emma Greenwell, Janet Henfrey, Sally Phillips,Dolly Wells, Hermione Corfield, Raiden Integra, Millie Brady
Productora: Cross Creek Pictures / Darko Entertainment / Handsomecharlie Films / Lionsgate