National Gallery

 

National_gallery_Ge_MC1

«Los espejos se emplean para verse la cara; el arte para verse el alma.» –
George Bernard Shaw.

Situada en la parte norte de Trafalgar Square (Londres), la National Gallery es uno de los principales museos del mundo en cuanto a la importancia de sus obras se refiere. Su colección permanente, que alberga unas 2.400 pinturas, engloba un abanico de piezas artísticas que abarca desde el siglo XIII hasta los últimos años del siglo XIX. Su excelso catálogo de obras la hace destacar sobre otras pinacotecas por contener muchos de los lienzos clave a la hora de entender la evolución de la pintura occidental y sus diferentes estilos desde el Renacimiento hasta el Postimpresionismo, preponderando sobre todo aquellos que tienen que ver con el arte italiano y neerlandés: Piero della Francesca, Rafael, Tiziano, Rembrandt, Turner, Da Vinci o incluso Velázquez y Goya figuran entre los autores cuyas obras podemos disfrutar en la galería, algunas de ellas trabajos capitales, como el Retrato del matrimonio Arnolfini, Lluvia, vapor y velocidad, el Jarrón con tres girasoles o La Virgen de las Rocas. Todo un tesoro que se puede contemplar de manera gratuita (excepto las colecciones privadas y temporales) ya que la entrada al edificio es pública y se considera que el patrimonio expuesto pertenece al Estado británico y por extensión a todos los ciudadanos que deseen visitarlo, por lo que el museo se convierte en un punto de paso obligatorio para aquellos que pasen por la ciudad del Big Ben.

Teniendo todo esto en cuenta, podemos decir que el último documental de Frederick Wiseman sobre dicho museo, el cual también lleva el nombre de National Gallery (2014), es una producción ineludible para aquellos que les apasione el arte en general y la pintura en concreto. Aunque algunos podrán pensar que un documental de 180 minutos sobre unas obras que pueden estudiar o visitar personalmente y de una forma algo más libre y dosificada no es algo atractivo en primera instancia, algo que sería una verdadera pena, pues perderse la cinta de Wiseman supone desaprovechar una oportunidad de oro para contemplar una ejercicio de cine documental impecable y una ocasión única para dejarse llevar a través de una cautivadora expedición a través de las diferentes dimensiones del arte.

National_gallery_Ge_MC2

A pesar de su fecunda filmografía y su longevidad como cineasta en activo, Frederick Wiseman es un autor bastante desconocido. Aquellos que ya hayan tenido la oportunidad de encontrarse con alguna de sus obras sabrán que su cine tiene un espíritu en el que la observación y el contacto directo (aunque no invasivo) con el entorno es el dogma a seguir. La cámara de Wiseman suele inmiscuirse en los espacios que estudia con sigilo y respeto, casi adoptando la condición de invisibilidad, logrando el milagro de que aquellos que son captados por su objetivo se comporten de la manera más natural o menos condicionadamente posible. En este sentido, podemos decir que su cine se acerca frecuentemente a la realidad con el propósito de tratar de componer luego un retrato representativo de ella que además goce de cierta estructura dramática y comunicativa. En el caso de National Gallery las características de su cine se presentan con una magnitud adecuada a la del tema que trata (incluso se prescinde de la voz en off), por lo que técnica y argumento terminan confluyendo de una forma que hacen que sus tres horas se antojen cortas.

No solo los apasionados de la pintura deberían acercarse a este documental, ya que Frederick Wiseman no se conforma con quedarse entre las fronteras de lo pictórico. También sería recomendable que lo hicieran aquellos que disfruten de la literatura, la historia, la escultura, la fotografía o incluso la cinematografía y la comunicación audiovisual, territorios que también explora National Gallery pues, el en el fondo, cualquier disciplina artística tiene una relación simbiótica con las demás y se retroalimentan respectivamente, por lo que la evidente experiencia sensorial (e incluso espiritual me atrevería a afirmar) que supone ver la cinta del realizador norteamericano se termina convirtiendo además en una ocasión perfecta para enriquecer nuestro bagaje en cualquiera de estos diferentes campos.

Aunque hay un plus que hace a National Gallery algo especialmente recomendable de ver. La curiosidad de Wiseman es ambiciosa y su espíritu insaciable por mostrar todos los planos de la realidad que retrata le ha llevado a conseguir meter su cámara en aquellos rincones a los que nadie puede acceder en condición de turista. Así pues, seremos testigos privilegiados de todo lo que se cuece en todas y cada una de las esferas que tienen que ver con el aspecto profesional y organizativo de la galería. ¿Cómo funciona un museo? ¿Quién se encarga de la conservación de las obras y cuáles son los procedimientos utilizados para ello? ¿Quién decide lo que se expone y qué lógica siguen para mostrar un repertorio de obras de tan diferentes características y temas? ¿Cómo se promociona (o cómo se debería de promocionar) un producto que no deja de ser patrimonio de la humanidad? ¿Cuáles son los diferentes criterios de gestión? Hay una multitud de cuestiones e interesantísimos debates que saltan a la palestra a medida que Wiseman enfoca su objetivo con su silenciosa y objetiva mirada en los diferentes espacios que componen el museo. Su mirada es joven y vital por la pasión que transmite e inteligente por lo que decide mostrar y cuando mostrarlo.

El resultado es un fresco imprescindible el cual no solo nos permite contemplar parte de la historia de nuestro arte con sus anécdotas y circunstancias, sino que además extiende y refleja nuestra mirada, invitándonos a observar nuestra idiosincrasia como seres humanos, explorando la estética y el alma de nuestro mundo, nuestra cultura y, en definitiva, nuestra especie.

Calificación: 9/10

 
 

National_gallery_Ge_MCcartelTítulo original: National Gallery

Año: 2014

Duración: 180 min.

País: Estados Unidos

Director: Frederick Wiseman

Música:

Fotografía: Jon Davey

Reparto: Documental

Productora: Coproducción USA-Francia-GB

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.