El videoclip del viernes
Cambio de tercio. Esta semana dejamos atrás el rollo electrónico y megatrónico cool de Simian Mobile Disco para ascender a otras esferas de sonido, mucho más estrambóticas y surrealistas (o hiperrealistas como se quiera ver). Una dimensión extrañamente amparada en sonidos turbios, extrañamente distendidos y absolutamente rompedores; generadores de ambientes rotos, recargados, extremos, exagerados. Este viernes, es hora de que pillemos la nave hacía el maravilloso universo de Muse. Una banda capaz de alejar el campo cognitivo hasta la hiperextrema sensibilidad. Un grupo capaz de generar mundos repletos de pliegues agudos amparados en la tristeza del sentimiento, en la locura transitoria y en la rabia del desengaño. Profetas sensitivos y exagerados. Siempre influenciados por el corazón.
Desde sus inicios, allá por el año 1994, siempre se han encargado de reafirmar su estilo y de consolidar sus raíces. Apoyado por una potencia desmesurada de la línea de bajo por parte de Christopher Wolstenholme; la extrema maestría a la guitarra eléctrica y la voz del, incombustible y poderoso, Matt Bellamy; y la contribución activa y compleja a la percusión de Dominic Howard; el sonido de la banda ha sufrido una evolución extrema y feroz desde su primer LP Showbiz hasta su última creación The 2nd Law. A medida que ha ido avanzando los años, y sin desmerecer el núcleo de su sonido, Muse ha ido transformando aquel rock básico y sensitivo con el que empezaron su andadura musical, en un rock de otra galaxia, totalmente espacial (y especial), sintetizando con calidez y descaro pasado y futuro.
Como muestra de ese cambio parcial de rollo, aparece en escena, posiblemente, uno de sus temas más marcianos y extraordinarios: «Knights of Cydonia». Ubicado en uno de los LP más originales de la banda, Black Holes and Revelations (el gran punto de inflexión de su carrera), si por algo se caracteriza el tema es por innovar y sorprender, por ofrecer sonidos góticos edulcorados con una fuerza rítmica espectacular y potencialmente enrevesada en un núcleo metálico. Apoyado en un videoclip espectacular, obra del experto realizador de videoclips (Onyx, Britney Spears, Black eyed peas…) y cuasi novel cineasta, Joseph Kahn; el tema consigue transportarnos a una esfera distinta, una mezcla bizarra entre el far west y Star Wars, un extraordinario paraíso de pistolas láser, vaqueros, robots y unicornios; una locura pulp intergaláctica.
Sin más, aquí tienen el clip. Disfruten del viaje hacía la otra parte del caleidoscopio.