Corazón de León
Corazón de León, que se pre estrenó en la sección iberoamericana del 17º Festival de cine de Málaga, donde yo tuve la ocasión de verla, arrancó un buen número de aplausos, risas y vítores entre la platea, entre los que debo reconocer que me incluyo, aunque quizá no sea nada realmente novedoso ni en exceso cómico, presenta una atmósfera agradable y acogedora perfecta para todos aquellos con ganas de pasar un buen rato sin acometer demasiados riesgos o dramas innecesarios.
La película nos cuenta la historia de León, un hombre hecho a sí mismo que pese a sus esfuerzos nunca ha conseguido ser visto como uno más debido a su estatura, y que intenta ganarse el amor de Ivana, una imponente mujer que aparece en su vida por casualidad. Si hay algo en particular que beneficia a una producción, es que su director tenga claro hasta donde llegan sus capacidades y haga de esto un arma, y sin duda Marcos Carnevale lo sabe muy bien. Con un guión muy fluido y eléctrico, que pese a no poseer una profundidad pasmosa, si que logra que nos fijemos en estas normas no escritas de la sociedad de hombres y mujeres perfectos que nos venden cada día por televisión, consigue llevar adelante todos los elementos que nos presenta incidiendo sobre todo en la pareja protagonista, que son desplegados por completo ante nuestros ojos, con sus vicisitudes y aristas, son desarrollados con buen tino al servicio del gran numero de gags que recorren el film, y también de los momentos dramáticos que acentúan el valor real de lo que nos es mostrado y tilda con el punto justo de realismo que esperamos de una producción cuyas raíces están profundamente enterradas en la comedia romántica. Un estigma que hiere a este tipo de producciones ya que para los ojos del mundo siempre estarán en un escalafón inferior al del drama romántico, debido casi con toda seguridad a que desde la muerte de Billy Wilder pocos directores talentosos de han acercado a este género.
Con un ritmo genial, y un montaje, que, sobretodo en su primera parte, es capaz de sumergirnos en la historia de manera sublime, haciendo que la cinta se nos haga realmente corta pese a rondar las dos horas, mucha culpa de ello tienen sus dos protagonistas, Guillermo Francella y Julieta Díaz, que embriagan cada minuto del metraje con su química transmitiendo una cristalina naturalidad. Por parte del León que da nombre a la película, tenemos a un carismático hombre de negocios que pese a medir poco más de un metro, no ceja en su esfuerzo a la hora de conseguir lo que quiere, y que pese a no haber vivido una vida fácil ha sabido proteger su sonrisa, dándole la réplica nos encontramos a una Julieta Díaz en todo su esplendor, que con su cotidiana belleza y candor natural enamora cada segundo que aparece en pantalla, teniendo ambos entre sus principales herramientas el encanto que la mayoría del pueblo argentino desprende, consiguiendo que este aura rodee a la película.
Calificación: 7/10
Título original: Corazón de León
Año: 2013
Duración: 110 min.
País: Argentina
Director: Marcos Carnevale
Guion: Marcos Carnevale (Idea: Betiana Blum, Marcos Carnevale)
Música: Emilio Kauderer
Fotografía: Horacio Maira
Reparto: Guillermo Francella, Julieta Díaz, Jorgelina Aruzzi, Nora Cárpena, Mauricio Dayub,Nicolás Francella, María Nela Sinisterra
Productora: Argentina Sono Film, Telefé
Una de las mejores películas argentinas que vi en mi vida. Consiguió sacarme más de una risa. Me encantó, pese a su final predecible.