Calvary

Decía el maestro Mckee en sus clases sobre guión que si no eres capaz de poner tus palabras en boca de tus personajes y tu película parece un discurso continuo, has fracasado. Cuando ves Calvary, esa es la sensación que transmite sin cesar, un montón de personajes, casi todos vacios, van soltando peroratas, casualmente compartiendo casi todos la misma visión del mundo a través de unos diálogos que no permiten el más mínimo intercambio de posiciones, todos son inamovibles. El director y guionista está encantado de haber llegado a esa incuestionable opinión del mundo, y se va a mirar el ombligo durante la hora y cuarenta minutos restantes, así que como ponía en la puerta del infierno de Dante, ‘abandonad toda esperanza los que aquí entréis’.

Un buen día, el padre James Lavelle, recibe una amenaza de muerte de un feligrés que se está confesando. Sirviéndose de esta trama tan simple McDonagh nos dice, repitiéndose una y otra vez, algo que gracias al estado del planeta y la extinción de infinidad de especies de nuestra fauna y flora había quedado claro hace mucho, el ser humano está más cerca de ser un virus infecto que un hiabitante más en la tierra. Poniendo de camino la sociedad e idiosincrasia irlandesa por los suelos, según a él le parece nada merece ser salvado de la quema.

Al igual que un telediario, con la sensacionalista calidad que tienen estos a día de hoy, el director nos va lanzando mierda de manera continua a la cara, culpándonos y señalándonos en vez de preocuparse el mismo por desarrollar o contarnos algo de su personaje protagonista, y mirar un poco hacia las ambigüedades de la vida, que son demasiadas como para generalizar de manera tan impersonal. De su intención de construir una comedia ni siquiera podemos hablar porque entonces el fracaso de la película sería demasiado notorio como para tenerlo en cuenta siquiera.

De manera desapasionada y haciendo gala de un ritmo nefasto, el director alarga los escuetos cien minutos de su metraje hasta el infinito haciendo que la densidad de la forma y el fondo te agarren por el cuello y no te suelten, y aquí si podemos afirmar que el realizador consigue su tarea principal, que es que no arrepintamos de nuestra existencia una y mil veces.

 

Calificación: 4/10

 
 

 

Título original: Calvary

Año: 2014

Duración: 100 min.

País: Irlanda

Director: John Michael McDonagh

Guion: John Michael McDonagh

Música: Patrick Cassidy

Fotografía: Larry Smith

Reparto: Brendan Gleeson, Kelly Reilly, Chris O’Dowd, Aidan Gillen, Domhnall Gleeson,David Wilmot, Dylan Moran, Marie-Josée Croze, Killian Scott, Isaach De Bankolé,M. Emmet Walsh, Pat Shortt, Gary Lydon, Orla O’Rourke, Owen Sharpe, David McSavage, Michael Og Lane, Mark O’Halloran, Declan Conlon, Anabel Sweeney

Productora: Irish Film Board / Octagon Films / Reprisal Films