Baby Driver
Mientras buscaba la mejor manera de comenzar esta crítica, pensé en qué la hacía distinta, qué había puesto su director en ella para que me hubiera atraído y satisfecho de tal manera, mientras escribía las ideas principales en el ordenador, escuchaba la (muy recomendable) playlist de su BSO en spotify y la repasaba mentalmente en mi cabeza. Ya lo tenía, lo tengo, en realidad, hay en Baby Driver dos conceptos claros que la hacen diferente al resto de blockbusters aunque no lo parezca a simple vista; el movimiento y la música. Puede que su historia no sea nada que no hayamos visto otras veces, pero su manera de abordarla, cercana al musical y con un punto de vista casi epiléptico (pero no por ello confuso) que la convierten en una auténtica experiencia, Dirigida y montada con una precisión asombrosa (rasgos ya presentes en la trilogía del Cornetto o Scott Pilgrim) vemos como la acción avanza sin descanso minuto tras minuto acompañados de (o acompañando a) una autentica colección de temazos que Wright incluye completos y prácticamente sin espacio entre ellos, hasta sumergirse en la hipérbole más física y pura posible.
En la cinta seguimos a Baby, un joven conductor especializado en fugas que arrastra una serie de traumas (físicos y psicológicos) que está atado a su trabajo por una cuenta pendiente con un poderoso mafioso, sin embargo, un buen día conoce a una chica y su vida da un vuelco, lo que provoca que se replantee tanto su futuro como su trabajo.
Con unos personajes igualmente exagerados en su forma y fondo, pero sin perder efectividad, y una sensibilidad exquisita que hace que entremos en su juego desde el primer minuto, no podemos sino soñar con lo próximo que hará el cineasta británico si esta cinta resulta un buen taquillazo, lo que garantizaría más libertad para arriesgar (tanto en la forma como en el tema) con un presupuesto a la altura de la creatividad que ha venido demostrando.
Baby Driver (como bien señala su título) es como esos recuerdos de nuestra adolescencia en los que todo luce frenético, emocionante y al ritmo de una canción que solo sonaba en nuestra cabeza, sobre todo porque pasaron por el filtro de nuestra memoria, y aunque la verdad no ocurriera así en realidad lo que impulsa nuestra vida sigue siendo aquel instante ya ficticio.
Calificación: 8/10
Año: 2017
Duración: 115 min.
País: Reino Unido
Director: Edgar Wright
Guion: Edgar Wright
Música: Steven Price
Fotografía: Bill Pope
Reparto: Ansel Elgort, Lily James, Jamie Foxx, Jon Hamm, Kevin Spacey, Eiza González,Jon Bernthal, Ben VanderMey, Thurman Sewell, Allison King, Lance Palmer,Keith Hudson, Patrick R. Walker, Hudson Meek, Troy Faruk
Productora: Coproducción Reino Unido-Estados Unidos; Big Talk Productions / Media Rights Capital / TriStar Productions / Working Title Films