Aliados
Tras unos años fallidos de Robert Zemeckis, el director que trajo al mundo la trilogía Regreso al Futuro parece que vuelve a coger aire en los espectadores y la crítica relanzando nuevamente sus ideas e historias. Si bien con El vuelo y El desafío se afianzó en el cine de supervivencia y reto personal, en su nueva etapa decide encarar una historia de amor encubierta en un ambiente hostil y con una historia de guerra (totalmente secundaria) que le ayuda con los giros y cambios de acontecimiento. Nuevamente se reúne de un elenco importante, lo cual siempre motiva y da caché a la obra para ser vendida, y así encuadra la segunda guerra mundial en una pareja de jóvenes que, sin conocerse previamente, se ven enamorados por sus atractivos que saltan a la vista.
Max es un espía del bando aliado que se enamora de su compañera Marianne, una francesa con un pasado atormentador. Tras una misión en África la pareja comienza una relación, dejando de lado sus trabajos de espía, y centrándose más en una familia fruto de la normalidad. Un día Max es llamado por sus superiores y le descubren un secreto oculto de su mujer, el cual cambiará sus vidas para siempre. Max es interpretado por un plano Brad Pitt, el cual actúa por pura inercia sin ningún nervio, ausente de carácter y con pocas ganas de convencer. Marianne es interpretada por la elegante Marion Cotillard, la que saltara a la fama internacional y a la boca de todos gracias a su magnífico papel de Edith Piaf. En Aliados (Allied, 2016) la ausencia de carácter se debate entre un guión en el que no pasa absolutamente nada y la pausa que quiere introducir el director.
Zemeckis quiere acercarse mucho al cine romántico clásico, sin embargo no adopta nada del atractivo de éste. Si bien en las historias de Audrey Hepburn, por poner un ejemplo, la elegancia era la base, en este caso la elegancia se envuelve de fotografía digital, de mucha técnica, y se nota muy prefabricado. Tampoco se ve un guión potente, que realce las conversaciones entre la pareja, que se observe una buena química entre ellos que llegue a conmover, a sentir el amor latente. Si estos dos ingredientes no están, la solución sería volcar la historia más en los temas secundarios, el bélico y la traición, que se quedan a medio camino siempre. Tras avanzar durante una larguísima hora, la sensación es de no haber pasado nada. Y sin embargo ahí sigues esperando un cambio, alguna sorpresa. Entonces llega la sorpresa, parece que todo se va animando, Max recibe un golpe duro al descubrir uno de los peores secretos de su mujer y, diez minutos después, la misma monotonía.
Se entiende la buena acogida que ha tenido la historia, bien es cierto que hay temas bien tratados y se agradece el no sobrecargar de tensión una historia que pide a gritos ser pausada. Sin embargo para ello hay que sazonar muy bien el guión, y conseguir unas interpretaciones precisas y convincentes, que en este caso ni por asomo. Aliados se queda en una potencia visual importante, ciertos momentos de tensión, y un desenlace que, aunque previsible, cierra bien el círculo. Fuera de esos veinte minutos nada ocurre, la película te da igual, y se olvidará en cuanto salgas.
Calificación: 4/10
Año: 2016
Duración: 124 min.
País: Estados Unidos
Director: Robert Zemeckis
Guión: Steven Knight
Música: Alan Silvestri
Fotografía: Don Burgess
Reparto: Brad Pitt, Marion Cotillard, Jared Harris, Daniel Betts, Lizzy Caplan, August Diehl,Simon McBurney, Thierry Frémont, Matthew Goode, Anton Lesser, Marion Bailey,Camille Cottin, Charlotte Hope
Productora: GK Films / New Regency Pictures / Paramount Pictures